“Que nada nos limite. Que nada nos defina.
Que nada nos sujete. Que la libertad sea nuestra propia sustancia”
Simone de Beauvoir. Escritora, profesora y filósofa francesa.
Por Elio Villaseñor G.
El pasado 2 de junio, los ciudadanos acudimos a las urnas para votar por la Presidencia de la República, los integrantes de la Cámara de Diputados y del Senado de la República. Además, se eligió la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), la renovación de las 16 Alcaldías y el Congreso de la Ciudad de México.
Tras conocerse los resultados, la CDMX cuenta con una nueva Jefa de Gobierno: Clara Marina Brugada Molina (MORENA). También se eligieron 16 nuevos alcaldes: la alianza ‘Sigamos Haciendo Historia’ (MORENA-PT-PVEM) ganó 10 alcaldías, mientras que la opositora ‘Fuerza y Corazón por México’ (PRI-PAN-PRD) obtuvo 5. Una más fue ganada solo por MORENA. La III Legislatura estará conformada, según el Acuerdo del Consejo General del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) del 8 de junio, de la siguiente manera: la alianza ‘Sigamos Haciendo Historia’ (MORENA-PT-PVEM) contará con 43 legisladores, la opositora ‘Fuerza y Corazón por México’ (PRI-PAN-PRD) con 20 diputados y MC con 1 curul.
En este contexto, nuestro trabajo consistirá en impulsar no solo las políticas públicas para los jóvenes, temas que fueron analizados y discutidos durante las campañas, sino también en promover los mecanismos adecuados para su implementación. Es de vital importancia proponer una estructura institucional que permita aplicar efectivamente estos proyectos en áreas gubernamentales con el presupuesto y personal necesarios, especialmente en las siguientes políticas dirigidas a los jóvenes:
- Sistema Público de Cuidados.
- Política de Empleabilidad Integral.
- Política de Educación Media Superior.
- Alternativas y Economía Social y Solidaria-Emprendimiento.
Para mejorar e implementar estos programas y políticas, es esencial adoptar un enfoque proactivo, demostrando que como sociedad podemos actuar de manera responsable y alerta para asegurar su ejecución eficiente y transparente.
Es fundamental evitar que nuestros proyectos se estanquen en los escritorios o se limiten al ámbito discursivo. Esto requiere pasar de la propuesta a la acción concreta mediante la definición de rutas y plazos claros para cada etapa del proyecto.
Debemos mostrar entusiasmo y ofrecer nuestras habilidades para convertir a los jóvenes en actores relevantes del interés público, creando espacios de diálogo y participación activa en la toma de decisiones e incentivándolos a proponer soluciones disruptivas y a experimentar con nuevas ideas.
Como sociedad, estamos comprometidos a hacer realidad estos cambios, aprovechando nuestra capacidad de incidencia y acción para asegurarnos de que las políticas dirigidas a los jóvenes no solo se planifiquen, sino que se realicen con éxito y generen un impacto positivo en sus vidas y en la sociedad en general.
Los tiempos que vienen exigen fortalecer el diálogo y hacerlo productivo, evitando la dispersión en temas secundarios. Para avanzar como país, es crucial crear condiciones para la participación de distintos actores y asegurar que los temas juveniles avancen. Será fundamental establecer un diálogo transversal entre gobierno y autoridades capitalinas recién electas y la sociedad, identificando y priorizando los temas más urgentes y relevantes para los jóvenes, basándonos en datos concretos y consultas con las juventudes. Esto es clave para evitar la dispersión y enfocar acciones en áreas críticas como educación, empleo y salud mental.
Se trata de aprovechar las puertas de diálogo y de oportunidad ofrecidas por las autoridades electas durante sus campañas, creando y fortaleciendo plataformas que faciliten la colaboración entre gobiernos, sociedad civil, sector privado y los propios jóvenes. Estas plataformas deben ser inclusivas y accesibles para garantizar la participación de todos los actores relevantes, adoptando un enfoque multidimensional que considere las interrelaciones entre distintos temas juveniles y promueva políticas que aborden las necesidades de manera integral.
Abrir canales de comunicación con el nuevo gobierno para afianzar su compromiso de fomentar redes de apoyo entre instituciones educativas, organizaciones juveniles, ONGs y empresas, compartiendo recursos, conocimientos y buenas prácticas. Además, es crucial establecer sistemas robustos de monitoreo y evaluación para asegurar que los programas se implementen de manera eficiente y se ajusten según los contextos sociales, políticos y económicos.
Con esa visión de futuro y del papel de los y las jóvenes oportunidad en el actual contexto, en esta Edición de Plataforma JuventudES, contamos con las colaboraciones de Hannia Yohali y Fernanda Monserrath, ambas del Grupo Asesor de Jóvenes (GAJ), que narran su empoderamiento cómo jóvenes oportunidad; de la Mtra. María de Ibarrola, del Cinvestav, que nos participa desde la academia su punto de vista sobre el programa Jóvenes Construyendo el Futuro; las de Pablo Ulises Rodríguez, de Proyecto JuventudES de Fondazione AVSI, y de Fernanda Torres, de Servicios a la Juventud, A.C. (SERAJ), quienes esbozan cómo hacer un cambio de narrativas sobre las juventudes en México y sus oportunidades frente al actual contexto político postelectoral y de transición de gobierno. Destacar también los aportes que desde Colombia Sergio Cortez, Miembro Voluntario de True Identity, y de Santiago Agudelo Murcia y Mateo Vera Ramírez, miembros del Grupo Asesor de Jóvenes–GOYN Bogotá, nos comparten sus estrategias y esfuerzos por empoderar a las y los jóvenes líderes desde sus respectivas trincheras.
El futuro de los jóvenes no es un asunto del mañana; tenemos que empezar a construirlo hoy para que sean sujetos de su propio desarrollo y participen activamente en la agenda del país. Esta perspectiva exige de todos mantener una actitud flexible y resiliente, adaptándonos a los cambios y desafíos que puedan surgir, y buscando siempre mejorar y optimizar la acción pública en función de los proyectos e iniciativas de los jóvenes.